jueves, julio 03, 2003

No todos tenemos la misma facilidad para olvidar. Hay gente de naturaleza amnésica que pasa de unas personas a otras sin escrúpulos ni apenas pestañear y escasamente tiene momentos de nostalgia que le hagan cuestionarse si no se habrá equivocado. Otros no tenemos esa habilidad, aunque quisiéramos tenerla para no estar siempre a vueltas con el recuerdo, esclavos de una memoria tiránica que nos obliga constantemente a echar de menos lo ausente. Igual que hay quienes ejercitan su memoria, yo soy todo un atleta del olvido, aunque eso sí, de escasas cualidades, porque toda mi dedicación obtiene pobres resultados. Envidio a quienes se quejan de su mala memoria, yo siempre lo hago de mi mal olvido, no saben lo que ganan con ello, y es que nadie valora nunca lo que tiene sino lo que ha perdido. Yo que tan poco me acordaba de ti cuando estabas cerca y tanto ahora.

No hay comentarios: