He estado repasando un poco lo que he escrito hasta ahora y no me ha gustado demasiado. Yo lo recordaba mejor de lo que me he encontrado. Me pasa lo mismo con la mayoría de las cosas, yo las recuerdo de una manera y al verlas de nuevo resultan ser bastante diferentes (por lo general peores) de lo que yo creía. Al parecer todos mis recuerdos están equivocados, porque todo recuerdo es una manipulación del pasado hasta convertirlo en algo totalmente distinto a lo que fue.
Ni siquiera creo que todo esto refleje de manera aproximada cómo soy, pero eso es algo a lo que sé nunca se llega, porque todas estas palabras que utilizamos para intentar explicarnos a nosotros mismos son insuficientes para describir esa esquiva realidad que se resiste a ser reducida a unas líneas. Pero uno no se resigna y sigue intentando lo imposible, porque sabe que sólo por ese camino podrá aproximarse mínimamente a lo que busca, aunque nunca lo alcance.
No estoy nada orgulloso de este blog como no lo estoy de mí mismo, ni siquiera sé cómo tengo la osadía de mostrar una parte de mí en público cuando tanto me avergüenzo de ella, porque tengo todos los defectos y muy escasas virtudes, soy inconstante, fugaz y breve, caprichoso, inestable y vago a veces, y si algo creo inoportuno no dudo en dejar todo para mañana, porque en el fondo, después de tanta espera,
uno sabe que mañana nunca llega.
No hay comentarios:
Publicar un comentario