miércoles, junio 20, 2018

No se puede rezar a Dios y al diablo. No se puede quedar bien con todo el mundo. Solo consigue hacerlo quien no se implica demasiado y no quiero en mi vida gente que no se implique demasiado. “El que no está conmigo está contra mí” decía un tal Jesús. Conmigo no valen medias tintas ni asomarse un poco por curiosidad. No puedes reír con mis enemigos mientras yo lloro a solas. No puedes negociar con el vergudo la pena, cada vez que confraternizais es como si apretaras el gatillo. No puedes quedarte siempre al margen y evitar pisar terrenos pantanosos. No puedes estar del otro lado y fingir que estás conmigo. No puedes pretender no mancharte nunca las manos mientras yo me desangro por la herida abierta.Tu indiferencia me rebela, tu cobardía me avergüenza, tu incapacidad para defender aquello en lo que de verdad crees me causa un profundo dolor, tu resignación a la injusticia es lo que me condena. No puedes estar a ambos lados del espejo. No puedes ser y no ser al mismo tiempo, esa es la cuestión. Y si aún tienes dudas de qué bando escoger, tranquila, que yo tomaré por ti esa decisión.

1 comentario:

Ikana dijo...

Decisiones, decisiones...