No renunciar a lo que fuimos, porque somos. No temer a las miradas indiscretas, porque no pueden hacernos daño. Hoy, aquí, ahora, respirar el pasado con la ilusión del futuro, impulsarnos en él para seguir adelante. Dónde quienes fueron felices a mi lado en la noche sin saberlo. Dónde quiénes supieron del dolor y la dicha a solas pero no solos. Os busco, porque me estoy buscando a mí mismo. Sólo una palabra tuya.
1 comentario:
Has vuelto justo el día que he acabado "Las renuncias". Gracias.
Aquel que sabe lo que busca, encuentra.
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