jueves, noviembre 30, 2017

A veces se me olvida que no tengo quince años, que no tengo ya edad para correr bajo la lluvia ni salir ahí afuera con el corazón en la mano ofreciéndolo a cualquiera a cambio de una sonrisa. A veces me desnudo ante algún extraño y luego me arrepiento de no haberme callado, y comprendo que no volveré a tener quince años, aunque duela aceptar que no habrá más veranos ni besos inexpertos ni mariposas volando y la vida tan solo un cruel desengaño. A veces recuerdo lo que es estar vivo y despierto enseguida con las manos vacías, lamentando haber sido tan solo un idiota que olvidó qué es la vida cuando tienes quince años.

miércoles, noviembre 29, 2017

No te cansas de invitarme al desastre, camuflado con las mejores galas. Fingiendo una firmeza que desconoces, me pides que rompa el silencio en pedazos y arroje mis miedos por la ventana. Con todas tus artimañas en juego me ofreces promesas tentadoras, labios, manos, excesos... recompensas plenamente satisfactorias al alcance de mi mano. Tan sencillo como marcar la casilla adecuada. Sé la respuesta pero no pienso ponértelo fácil, no caeré una vez más en tus trampas, conozco mis derechos aunque no los menciones, sé que todo lo que diga será sin duda utilizado en mi contra.