miércoles, julio 18, 2018

Hay que aprender a convivir con la incertidumbre, empezar a admitir que no hay una respuesta única a nuestras dudas, a que cuando creemos tener la solución, todo cambie, porque nada es permanente ni siquiera estable, pero tampoco podemos descartar lo que antes pensábamos, pues puede que mañana vuelva a hacerse realidad lo que creímos ya imposible que regresara. Todo cambia y a veces vuelve, todo es una cosa y su contraria en algún momento, no hay un principio fijo al que acogerse, una idea clara que nos sirva de guía, porque lo que hoy es válido puede que mañana no lo sea y pasado tal vez sí de nuevo o quién sabe. Nunca sabes lo que va a pasar. Por eso no me empeño en defender mis opiniones y creencias, porque no poseo niguna certeza y sé que todo depende, no ya del cristal, sino del ojo que mira.

2 comentarios:

Recomenzar dijo...

Excelente tu entrada todo es cuestión de percibir como percibimos la vida hoy
quizas mañana será diferente

Ikana dijo...

Salto al vacío