sábado, julio 07, 2018

No necesitas buscar una excusa cualquiera para justificar tu comportamiento. No te estoy pidiendo explicaciones ni pienso cobrarte la factura. Considera saldadas todas tus cuentas. Puedes estarte tranquila y dejar por fin de inventar historias retorcidas que den sentido a tu aburrida vida sin fundamento. Olvídate de justificar los errores cometidos. No confieses más tus pecados ni te arrepientas del pasado, no debes temer mi reacción ni la de cualquiera, no te guardo rencor ni tengo que hacerte ningún reproche, no hay nada que deba perdonar, porque francamente, querida, me importa un bledo.

1 comentario:

Ikana dijo...

Justificarse solo ante uno mismo