jueves, abril 08, 2004

Desaparecer, abandonar el cuerpo como se abandona un recuerdo, alejarse como única respuesta. A veces huyo de mí, renuncio a esta manera de vivir. Después regreso vencido, reconociendo la derrota definitiva, hasta que todo se olvide y pueda volver a creer en algo. Aquí estoy de nuevo, dispuesto a compartir el dolor y la gloria, a entregar más de lo que tengo, a decir más de lo que sé. No hay razones para hacerlo como no las hay para ninguno de nuestros actos, sólo me apetecía estar aquí y saber que tú también estás, tener algún motivo para la esperanza, creer que aún hay personas que sienten como yo, imaginar, sentir, tal vez vivir...

No hay comentarios: