miércoles, febrero 07, 2018

Si no hay nada de lo que te arrepientas, tu vida no vale la pena. Porque para ganar hay que arriesgar, si no estás dispuesto a jugar, todo será muy aburrido y nunca alcanzarás la victoria. He hecho muchas cosas mal en mi vida y te anuncio que seguiré haciéndolas, he apostado todo al rojo y salió negro, he gastado lo poco que tenía en empresas que no prosperaron, he invertido mi tiempo y mi esfuerzo en personas que no lo merecían, he fracasado mil veces y me arrepiento de muchas de las decisiones que tomé. Solo espero que mañana no tenga también que arrepentirme de esto.

1 comentario:

Unknown dijo...

Al final, lo ganado, siempre permanece y prevalece sobre lo perdido, sólo queda el recuerdo de que alguna vez se jugó, hay que relativizar.